MÉRIDA, Yuc.- Estigmatizar a la zona del sur de la ciudad como un lugar en el cual existen muchos problemas sociales es un asunto de percepción, ya que la violencia, el pandillerismo, la drogadicción o el alcoholismo no son privativos de un lugar de Mérida, pues suceden en todas partes, dijo Rubén Osorio Paredes, presidente de la agrupación Sur en Movimiento Social A.C.
Aseguró que el problema que tiene esta parte de la ciudad es de estigma, porque ese tipo de conflictos son males sociales que se presentan en todas partes...(seguir leyendo)
-Es un problema de percepción con hechos reales, ya que no todo lo que se dice sobre el sur de la ciudad es verdad, sino que hay que encontrar un justo medio y valor -aseguró.
Este tipo de cuestiones se puede revertir al difundir las cosas positivas que se hacen para que los adultos, jóvenes y niños no se sientan estigmatizados por vivir en una área de la ciudad, sino que, por el contrario, tengan espacios de recreación, testimonios de vida de personas que han salido adelante a pesar de la precaria condición económica.
En este sentido, reconoció que la pobreza genera otros males y por esa razón se da el pandillerismo, la violencia y la falta de educación, pero no es un asunto exclusivo de esa zona de la ciudad, por lo que no hay que pasar por alto que esto se presenta en todo Mérida y en todo el país.
Señaló que los integrantes de la agrupación Sur en Movimiento está conformada por gente que nació en esta área y que todos son profesionales, ya que hay maestros, abogados, psicólogos y doctores.
-Hay mucha gente joven que estudia una carrera; se tendría que abrir foros para que brinden su experiencia y expliquen cómo le hicieron, y así repetir con otros el mismo plan -consideró Osorio Paredes.
Acerca de los puntos buenos que tiene la zona sur que mucha gente no ve, destacó que se encuentra el que ha tenido un crecimiento económico importante con la creación de nuevos fraccionamientos, y eso significa que la gente trabaja, y si se le dan los espacios necesarios lo aprovechará más.
Sin embargo, reconoció que hay pandillas, pero que tienen las mismas características que las de otras partes de la ciudad; por ello, mencionó que el 50 por ciento de la imagen del sur es de percepción y el otro 50 por ciento es un problema real que hay que atender con la misma fuerza que en otras partes de Mérida.
En torno al estigma, dijo que los habitantes de esas colonias no piensan en la gente del norte como muchos suponen, porque no hay gran contacto entre ellos; "aunque sería bueno promover la inversión en esa parte, ya que también existen personas con un alto poder adquisitivo".
"Esto ayudaría a desmitificar la situación y a combatir los males sociales; pediremos al sector empresarial que invierta en esta zona y que no crea todo lo que se dice, ya que parte es percepción y parte es un mal social", refirió Osorio Paredes.
Ven en hip hop una tablita de salvación
La cultura hip hop que la componen el rap, el graffiti, el breakdance y el tornamesismo, que tienen mucha presencia en el sur de la capital yucateca; es un movimiento el cual brinda la oportunidad a los jóvenes de demostrar su talento y que en esta parte de la ciudad no sólo priva la inseguridad, la drogadicción o la desintegración familiar.
Eduardo Rafael Vargas Puerto, dirigente de la fundación Ceiba Flava, aseguró que el rap y el graffiti tienen mayor auge en esa zona, donde incluso se hacen concursos para alejar a los jóvenes de las drogas y el alcohol.
Aseguró que ésta es la otra cara del sur de Mérida, donde las autoridades deberían abrir más espacios para que los adolescentes puedan expresarse libremente a través del graffiti, pues tienen muchas cosas que decir.
Esa actividad, dijo, es considerada terapéutica, porque les permite tener algo de introspección y poder superar problemas personales a través de la expresión.
Reconoció que en esa parte de la ciudad se requiere de mayor participación, por la problemática existente, y se tendrían que promover más actividades, ya que esta parte de Mérida no todo es vandalismo, drogadicción o alcoholismo, sino que también hay gente con talento.
"Tenemos algunos estereotipos que hacen que a las personas de este lugar se les vea en otra forma, se tiene que cambiar esa mentalidad. El hip hop se encarga de promover acuerdos y de no generar conflictos, no está vinculado al pandillerismo, y es un medio de comunicación, ya que con esto se promueve la tolerancia y el respeto", destacó Vargas Puerto.
Con relación al concepto que tiene la ciudadanía sobre el sur de la ciudad, el dirigente de la agrupación Ceiba Flava dijo que muchos piensan que es un lugar donde se concentra toda la problemática por la disfunción familiar, jóvenes con pocos estudios o que se dedican a delinquir, pero hay mucha gente con talento y con ganas de cambiar sus hábitos negativos, pero requieren apoyos.
Dejó en claro que, en muchas ocasiones, los jóvenes lo que quieren es expresarse a través de un graffiti en una barda, componer una canción o bailar, y por eso es necesario sostener acuerdos con las autoridades que se encargan de promover este tipo de actividades.
Estereotipos crean división en la ciudad
Al hablar del sur de la ciudad de inmediato a muchos les viene a la mente la pobreza, falta de servicios, vandalismo, drogadicción, alcoholismo y desintegración familiar; mientras que mencionar el norte significa riqueza, grandes centros comerciales y mansiones, lo que genera un estereotipo equivocado entre el mismo yucateco.
José Luis Vales Lara, psicólogo de la agrupación Salvemos una vida, dijo que esto es lo principal que afecta a la población del sur de Mérida, donde también hay gente profesional y trabajadora que tiene ganas de salir adelante.
En torno a los principales problemas que enfrentan los jóvenes y los niños en esa zona, manifestó que están la desinformación, la transculturización, y cosas que ellos quieren y que no pueden tener, situación que los frustra.
Sin embargo, dijo que también hay acceso a la Internet, comercios y personas que tienen autos de lujo, pero que se requieren de una mejor oportunidad recreativa y laboral, como lo tienen la gente de otras partes.
"Se tiene que ayudar a esta parte de la ciudad a incorporarse al resto de Mérida de una manera sana y que la comunidad se dé cuenta de ello, porque no puede haber divisionismo interno, y el que diga que no es cierto es porque miente", destacó Vales Lara.
En cuanto a los estereotipos, dijo que esto es clásico en Mérida, y dio como ejemplo que en las escuelas particulares del norte en las que brinda clase, los alumnos no conocen el centro, y mucho menos el sur de la ciudad, ya que tienen que hacer tours para que se familiaricen con el lugar.
"Para ellos el sur está prohibido, es algo rechazado y lo peor de la ciudad; la única vez que pasan por ahí es cuando van a la feria de X'matkuil y van por la calle 50, o desde afuera, por el Periférico, está totalmente discriminado", reconoció el psicólogo.
En torno a qué hacer para evitar esta situación, dijo que sería quitar el aeropuerto de donde está, porque obstruye la circulación de personas y de culturas entre el sur y el norte, ya que al quitarse se hará una Mérida unida.
Sin embargo, reconoció que en el sur hay mucha "contaminación" en cuanto a las adicciones, sobre todo en la parte posterior de la terminal aérea, en la cual hay ciudades "fantasma" con asentamientos humanos irregulares, lo que es un mundo desconocido para muchos.
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